Los otros campeones cuervos del fútbol Panamericano

El primer torneo Panamericano se realizò en nuestro país, en la ciudad de Buenos Aires bajo la presidencia del General Juan Domingo Peròn. Argentina ganó un pentagonal ante Venezuela, Costa Rica, Chile y Paraguay. A San Lorenzo lo representò el defensor Josè Carlos Glini, que había debutado prematuramente en primera en 1948, debido a la huelga de profesionales. A pesar de ser una joven promesa solo completò 45 partidos con la azulgrana, hasta su alejamiento en 1953.

En 1955 Argentina repitió el título de campeón en fútbol en el Distrito Federal de Mèxico, aventajando en otro pentagonal a los locales, a Venezuela y a las Antillas Holandesas, en partidos de ida y vuelta. Josè Francisco Sanfilippo participò por San Lorenzo y fue la estrella del torneo señalando 9 de los 23 goles nacionales. El “Nene” se convertirìa en pocos años en el máximo goleador de la historia azulgrana.

En 1959 Argentina repitió por tercera vez el título Panamericano en fútbol en Chicago (USA), pero en aquella ocasión no hubo representantes azulgranas. No fue hasta los Juegos de Cali (Colombia) en 1971 en que Argentina obtuvo su cuarto título, que un nuevo jugador azulgrana integrò el plantel. Hèctor Horacio Scotta (que ese año fue contratado a Uniòn de Santa Fè), el querido “gringo”, representò a San Lorenzo en dicho certamen.

La quinta medalla dorada en fútbol recién se produjo en los Juegos de Mar del Plata en 1995 y por San Lorenzo la disputò de forma especial el “diablo” Roberto Monserrat, ocupando uno de los cupos para mayores de 23 años. La experiencia del cordobés fue útil para aquel campeón “accidentado” y con poco brillo que dirigía Daniel Passarella. En ese año Monserrat ganó el título con San Lorenzo, luego de 21 años sin conquistas locales.

Finalmente en Santo Domingo (Repùblica Dominicana) en 2003, en el equipo entrenado por Miguel Ángel Tojo que ganó el Oro ante Brasil, participaron el defensor Jonathan Bottinelli (campeón en 2007 con el Ciclòn) y el volante chubutense Alexis Cabrera, de fugaz paso por la primera división. En aquel torneo fue relegado a último momento Roberto Cornejo, luego de ser preseleccionado entre 20 jugadores y que por motivos reglamentarios se redujeron después a 18.

Un caso curioso se generò con el defensor Walter Garcìa, que participò representando a Argentinos Jrs, pero que con la competencia en desarrollo fue adquirido por San Lorenzo. Hubo otros casos de campeones panamericanos en fùtbol, contratados posteriormente a la obtención de la medalla dorada. Luego de la primera edición de 1951 el Ciclòn comprò al delantero mendocino Josè Giarrizzo al club Andes-Talleres y en 1955 hizo lo mismo con el defensor tucumano Manuel Castillo, abonado al club Central Norte de Tucumàn, tras ganar Castillo la dorada en el Df mexicano.