El Handball es de Primera

Va llegando el cierre de cada Torneo y es cuando los equipos empiezan a ver los frutos que dejó un año de mucho trabajo. El Handball femenino de San Lorenzo luego de una gran lucha que comenzó en 2017 con un objetivo muy claro, empezó a escalar de a poco y finalmente consiguió lo que tanto deseaba: el ascenso a la Primera División.

Luego de quedar entre los ocho mejores equipos del certamen, tras finalizar la fase regular en el tercer puesto con 33 puntos, le permitió disputar el Torneo Super 8 de FEMEBAL, en el que en los cuartos de final venció a Grilli por 27-20 y consiguió el salto de categoría.

Mientras que el encuentro fue dominado por el Ciclón y el conjunto que dirige Javier Bazan ganó el duelo con autoridad, se jugó un partido muy cerrado. Sin embargo se logró desplegar el potencial de las chicas. En una charla exclusiva con Mundo Azulgrana, el técnico comentó cómo estaba el equipo para ese partido: “Llegamos a ese partido en nuestro punto máximo de rendimiento, ya que éramos concientes que había ido de menor a mayor en cuanto a resultados, volumen de juego y condición física”.

Por otro lado, mencionó el proceso que tuvieron que hacer desde el cuerpo técnico para llegar a cumplir con el objetivo: “Este logro se empezó a elaborar allá por el 2017 con un primer equipo de cadetas, (inferiores) que empezó a ganar campeonatos y ascensos desde la categoría D. Fueron creciendo y las categorías de abajo fueron teniendo también sus logros deportivos. Hoy el ascenso se hizo realidad gracias a qué alguna vez lo soñamos todos y nos pusimos a trabajar muy duro en ese camino”.

A pesar de que no fue un proceso para nada fácil y que se viene proyectando hace varios años, Bazan explicó cómo inició todo: “Después del ascenso a la categoría B en inferiores en el 2019 encaramos el 2020 proponiendo nos que las mayores también debían ir por un ascenso. De esa manera nivelariamos hacía arriba la competencia y podríamos aprovechar el envión que traiamos de las inferiores para subir la vara de rendimiento” y agregó: “Fue así que sumamos al primer equipo de mayores damas de muchas chicas de inferiores (juveniles y juniors), también vinieron jugadoras de otros clubes que les interesó el proyecto y rápidamente se acoplaron a un numeroso plantel dispuesto al desafío. La pandemia hizo lo suyo y tuvimos que esperar un año para volver”.

Si bien nunca se dieron por vencidos pese a las barreras que se le pusieron en el camino, tras entrenar el 2020 por Zoom, las jugadoras arrancaron el año siguiente con toda y tenían muy claro el camino a seguir. Después de muchas prácticas y de tener una idea clara, el conjunto azulgrana consiguió su tan ansiado ascenso y son un orgullo para la institución.