Mediocridad con suerte

San Lorenzo volvió a jugar muy mal, pero un gol de Nicolás Reniero cuando el partido se acababa decretó el 1 a 1 final. Sin identidad, con fallos arbitrales en contra y sin ideas, se robó un punto de la quema.

En la única que le dieron Reniero facturó. El Ciclón se trajo un punto del Ducó a pesar de jugar horrible

En la única que le dieron Reniero facturó. El Ciclón se trajo un punto del Ducó a pesar de jugar horrible

Tranquilamente podríamos repetir la misma crónica de cada fin de semana: San Lorenzo volvió a jugar de forma espantosa y por el solo hecho de tener una camiseta con peso en los clásicos le sacó a Huracán lo que era una victoria consumada. ¿Era justo que gane Huracán? No, porque a pesar que el Ciclón fue muy malo, el local no generó nada, y en un desborde de Ignacio Pussetto (lo único destacado de ellos), Chávez completó la acción empujándola a arco vacío cuando se moría el primer tiempo.

Si no se nombra nada de San Lorenzo en la primera parte es porque los de Claudio Biaggio no le vieron la cara a Manuel García, y en el único intento de rematar al arco, un jugador -de campo- Quemero la atajó como si fuera arquero de toda la vida, pero Fernando Echenique hizo caso omiso. Ya en el complemento, se esperaba que con actitud y paternidad los lleváramos por delante, pero ni siquiera eso se vio de un deslucido Matador. Flojo nuevamente Fernando Belluschi, desconectados Reniero y Blandi de todos los demás, desaparecidos los juveniles Moyano y Barrios.

Biaggio, tan perdido como los de adentro, esperó nada más que 32 minutos para hacer un cambio, cuando dio ingreso a Leandro Romagnoli para intentar buscarle un socio a Belluschi. Caruzzo, entendiendo que los de Alfaro se habían retrasado en el campo, se auto-ubicó de centro delantero faltando tres minutos, y tras una diagonal con centro del llanero solitario, Nicolás Blandi, el central se llevó una marca y apareció por detrás de todos Nicolás Reniero para elevarse y romperle el arco a García con un frentazo lleno de gol, a dos minutos del cierre. 100% de eficacia para un San Lorenzo que no había llegado nunca.

Luego una llegada tarde de Robert Piris da Motta, el mejor jugador del Ciclón (hace varios partidos), le valió la segunda amarilla y los últimos minutos San Lorenzo aguantó un empate pobre, a escasos metros del arco de Nicolás Navarro. Así culminó una edición más del clásico de barrio, en donde Huracán sufrió el peso de la historia y no le pudo ganar a uno de los peores San Lorenzo de los últimos años.

Mundo Azulgrana

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Sitio web y programa de radio dedicado al Club Atlético San Lorenzo de Almagro

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