El gol de Zacarías que cortó la mala racha con River

El 8 de diciembre de 1991 San Lorenzo venció a los de la banda roja por 2 a 0, que venían punteros e invictos del Torneo Apertura. Esa tarde inolvidable el Ciclón cortó una serie negra de 8 años sin vencer a River, con un misil para el recuerdo que abrió el marcador del defensor Claudio Zacarías.

Se jugaba la fecha 16 del campeonato apertura y en cancha de Vélez el Ciclón dirigido por el “nano” Areán enfrentaba al River puntero de Passarella, ante un lleno total del estadio. San Lorenzo ya no era el equipo protagonista del Clausura y la liguilla ganada meses atrás, había bajado mucho su juego y enhebraba una cantidad considerable de empates frustrantes (antes del partido con los “millonarios” registraba 12 igualdades, con 2 triunfos y 1 derrota). Cualquier similitud con la realidad es mera coincidencia.

San Lorenzo se presentó con Rubén Ruiz Díaz en el arco, Zandoná, Simionato, Ballarino y Zacarías; Matosas, Fabián Carrizo, José D. Ponce, Roberto García; Alberto Acosta y Monarriz. A los 22m los dos equipos tuvieron un expulsado por lado: el goleador Ramón Díaz, luego de una reacción desmedida ante Simionato y del uruguayo Matosas en el tumulto.

River si empataba esa tarde salía campeón e intentó desnivelar a toda costa, convirtiendo al paraguayo Ruiz Díaz en una de las figuras. Pero esa tarde apareció el Ciclón de las grandes jornadas de su historia y cuando parecía que el partido era solo aguantar los embates de River, llegó ese misil desde 30 metros ejecutado por Zacarías (a los 30m del complemento) que se clavó en el ángulo superior derecho de Comizzo.

Para Zacarías esa tarde fue una revancha personal, luego de la explosión en el vestuario de la cancha de Instituto el 8 de mayo de 1988, por una bomba de estruendo asesina arrojada por la barra local que hizo explotar un vidrio que se le incrustó en un brazo, haciendo que casi perdiera no solo su extremidad sino también su vida. Recuperado de aquella jornada casi trágica el jugador emigró al fútbol turco, regresando a San Lorenzo en julio de 1991.

Cuando restaba solo un minuto para el final, Roberto “toto” García remató luego de una buena habilitación del “beto” Acosta que lo dejo solo ante Comizzo. Fue el 2 a 0 de un triunfo inolvidable, que terminó con una terrible racha de 8 años y  17 partidos sin vencer a los de Núñez (7 empates y 10 derrotas). Para no ser menos el Toto García convirtió también el gol del 1 a 0 logrado el 14 de junio del 92, que concluyó con los 19 años sin ganar en el Monumental.  

POR LEANDRO D'AMBROSIO

Mundo Azulgrana

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