La decisión que desnudó la verdadera intención de Arasa para perjudicar a San Lorenzo
La bronca sigue en San Lorenzo tras la injusta eliminación en Santiago del Estero en las manos de un arbitraje teñido de sospechas.
La noche en Santiago estuvo teñida de sospechas. La bronca perdura en el lado azulgrana. Todo San Lorenzo mastica impotencia por una eliminación injusta por un arbitraje cuyas decisiones quedaron expuestas a la vista de todo el fútbol argentino, que las criticó. Una jugada puntual desnudó las verdaderas intenciones del árbitro, Nazareno Arasa.
Fue la expulsión de Jhohan Romaña. A Algunos puede haberles pasado por alto, otros tal vez no se percataron de un detalle para nada menor: Arasa echó mal al colombiano, pero no lo hizo por roja directa, sino por doble amarilla. ¿Qué tiene de extraño esto? Una roja directa hubiese obligado la intervención del VAR para corregir el fallo, al mostrarle la segunda amonestación el juez de campo anuló una posible intervención desde Ezeiza. Todo pensado...
La insólita expulsión a Romaña. pic.twitter.com/RI3PKdDzFj
— Mundo Azulgrana (@MundoAzulgrana) November 23, 2025
Romaña había sido bien amonestado por una protesta vehemente cuando el árbitro fue a revisar la jugada del penal -inexistente- de Ignacio Perruzzi. El quite fue limpio, pero el VAR llamó igual y Arasa no perdió la oportunidad de cobrar la pena máxima. Ese fue el empate de Central Córdoba y ahí el partido comenzó a inclinarse hacia el local.
Luego, Romaña ganó un lateral en un duelo mano a mano con un rival, con quien quedó frente a frente. El jugador de Central Córdoba simuló un cabezazo que no ocurrió y el juez “compró”. Pero no le sacó la roja directa, lo que hubiera correspondido por una agresión; sino que lo amonestó para luego echarlo. De ese modo, desactivó una posible intervención del VAR.
No trates de entenderla, sufrila...

