No se pudo

Se terminó la ilusión. Se sabía que no iba a ser fácil, pero se soñaba con un milagro doble: golear acá y que en Brasil no gane San Pablo. Ninguna de las dos situaciones fue posible.

A San Lorenzo le faltaron ideas para quebrar el orden defensivo de Danubio. En los primeros minutos parecía que iba a golear, sin embargo, con el 2-0 en Brasil y el hombre de menos que tenia Corinthians, el equipo pareció queadr muy golpeado. Como se pensaba, con la ausencia de Blanco el conjunto de Bauza se quedó sin generación de juego, y el doble "9" Cauteruccio - Matos quedó muy aislado.

Romagnoli estuvo muy solo para intentar generar algo, ya que Villalba no pudo tampoco pudo conectarse en el encuentro, y los laterales intentaban empujar por los costados, pero sin claridad. Julio Buffarini, con entrega y sacrificio, ya en la primera etapa se perfilaba como la figura del Ciclón.

En la segunda etapa, el "Patón" intentó quebar a la defensa uruguaya con los rapiditos y hábiles Avila y Barbaro, pero los uruguayos siguieron bien parados y ordenados. Pese a esto, los pibes pudieron seguir sumando minutos en primera y mostrar que tienen condiciones.

Para colmo, cuando el partido marchaba a un empate en cero, un cabezazo dejó a San Lorenzo con las manos vacías. Derrota por 1 a 0. El Pedro Bidegain, seguía encendido con los cantos de la gente, que una vez mas se hacía protagonista del partido.

Esta vez el milagro no pudo ser. Un grupo complicado, mala puntería en ciertos encuentros, escaso volumen de juego, algunos planteos erróneos fueron algunas de las causas de esta eliminación. Pese a esto, solo caen los que dan pelea. San Lorenzo quiere ser protagonista en todas las competencias y ha tomado eso como una sana costumbre.