"Sería la frutilla del postre poder volver"
Juan Ignacio Mercier, Ídolo de San Lorenzo pasó por Mundo Azulgrana Tv y habló de todo. Desde su llegada al club, la Obtención de la Copa Libertadores, su relación con Pablo Guede y hasta la chance de volver a vestir la camiseta cuerva a corto plazo.
“El cariño de la gente uno sabe que lo tiene, pero siempre dije que ídolo en San Lorenzo es Romagnoli. Sabemos lo que significa, lo que ha ganado, se ganó el cariño de la gente. Uno trata de mantener un perfil muy tranquilo. Al hincha le agradezco por todo lo que viví en San Lorenzo. Te hacen sentir el cariño cuando te paran en la calle y te hablan del club”, reveló Juan Ignacio Mercier en Mundo Azulgrana Tv, por FWTV.
En primer lugar, recordó su arribo a Boedo: “Cuando llegué a la institución, la gente de seguridad no sabía que llegaba y no sabían quién era. Tuve que llamar a Matías (Lammens) para avisar que estaba hacía media hora esperando. San Lorenzo venía de jugar la promoción con Instituto, de salvarse de la B. Yo sabía las condiciones, era consciente, pero iba a aportar mi granito de arena".
Sin embargo, al poco tiempo logró ganarse un lugar como titular, siendo un pilar importante en la obtención del Campeonato Inicial 2013: “El equipo de Pizzi jugaba bien porque, entre otras cosas, teníamos un preparador físico que le sacó jugó a todo. Y después porque éramos consiente quiénes tenían que atacar y quiénes defender. El torneo fue muy bueno, había niveles muy altos y el equipo se fue potenciando”.
En el recuerdo, Juan Ignacio no dejó de retroceder en el tiempo para revivir el gol ante Bolívar en la semifinal de la Copa Libertadores: “Yo no soy de hacer muchos goles pero ese fue muy importante. Le hice uno a Gimnasia Lp, pero ese fue especial. Veníamos muy entusiasmados y por suerte logramos el título. La imagen que se me viene de la Libertadores cuando el Patón dijo que no venia los penales “si ya ganamos”. Uno no puede creer lo que confiaba en el equipo que tenía. El Patón transmitía tranquilidad, no andaba con vueltas".
Y directamente, la memoria lo llevó a la final del Mundo ante Real Madrid: “Es un gran recuerdo la final en Marruecos y llevar la cinta de capitán. Pero llevando o no, el capitán era Romagnoli. Ese partido no le tocó estar. Si perdíamos la semifinal nos fallábamos nosotros y a la gente. Hay mucha gente que la tarjeta le salía humo o postergaron sus vacaciones. Era algo histórico que a San Lorenzo se le venía negando. Nos enfrentamos a otro tipo de fútbol, a otro sistema. Nos tuvimos que adaptar y fue duro. En Europa se juega de otra forma, acá hay mucho más roce; allá es foul".
Poco tiempo después y ya sin Bauza en el banco de los suplentes, el Pichi fue protagonista del comienzo de la depuración del plantel campeón de América: “Se podría haber sostenido el equipo de la Libertadores, pero se fueron cambiando los entrenadores. Muy pocos juegan 4-4-2. A mí me tocó irme de San Lorenzo por una cuestión de edad o de juego, y no dije nada, agradecí y me fui".
Respecto a eso, explicó: “Me tomaría un café con Guede, no sé si él conmigo. ¿Por qué no me tomaría un café con Guede? Para mí él pasado es pasado. Son decisiones que tomó, las respeto. Nunca dije nada, todo lo contrario; a mí me tocó estar afuera y seguí trabajando como un profesional. Las decisiones las toman los técnicos. Fui consciente que tenía que seguir trabajando y cuando llegó el momento demostré que estaba capacitado para seguir jugando en San Lorenzo. Al final, en mi salida, de mi parte se acabó un proceso en San Lorenzo, me dijeron que no me iban a tener más en cuenta. Agradecí y me fui tranquilo. Si bien no era la forma que se tenían que ir mis compañeros, de uno se fueron yendo y en silencio”.
Sin embargo, recordó el partido posterior a la final con Boca en Córdoba, donde en pleno festejo y sin estar concentrado, la gente lo ovacionó por sobre el resto del equipo: “Me sorprendió cuando la gente coreó por mí después de la final de Boca. Poco tiempo después volví a jugar y también se hizo un buen torneo. Lo que pasa es que se definió mal. Para la final contra Lanús yo justó me lesioné dos semanas antes, Orti también. Veníamos tocados. Lanús también venía muy alto, con una identidad de juego, con un técnico que sabía lo que quería. No hay que quitarles mérito”.
Siendo uno de los jugadores más respetado de los últimos años, El Pichi habló de la situación que atraviesa Gaich, respecto a su venta y lo comparó con lo sucedido con los jóvenes que aparecieron cuando él estaba en el club: “Gaich es un chico muy educado y con un perfil bajo. Solo demostró que está capacitado para hacer las cosas que ha hecho y lo ven del fútbol de afuera. Es una camada similar, pibes muy educados que son profesionales, igual que Senesi, un chico de un perfil muy bajo. Esperó su oportunidad, la aprovechó, demostró y hoy está en un Club muy importante. Algo similar nos paso con Angel Correa. El escuchó a todos los grandes y por eso está donde está. Hoy por hoy es difícil entrarle a un chico, pero en ese momento, eran muy ubicados. Uno sabía que Angelito (Correa) iba a proyectarse rápidamente al fútbol europeo, era una realidad. Después que cada uno iba a afrontar otro destino, no creía que iba a llegar. Kanneman ganó de nuevo la Copa Libertadores. Son chicos con sacrificio y se merecen eso".
Entre otras cosas, recordó el duro momento que le tocó vivir al hoy jugador de Atlético Madrid: “Cuando suben a Angelito, lo veías con el pelo teñido, arito, la nueva generación. Después fue madurando. De repente lo vendieron y te enteras que tiene el problema en el corazón y no sabes si va a volver a jugar. Vuelve a argentina te lo encontras con un cierre en el pecho. Cuando dimos la vuelta en la cancha, él merecía ver todo eso. Yo se lo prometí".
Respecto a su futuro, el Pichi declaró que desea seguir jugado un tiempo más antes de dejar el fútbol y dedicarse a la dirección técnica: “Siempre están las ganas de volver a San Lorenzo, pero uno quiere seguir jugando y estar dentro de un campo de juego. Sería la frutilla del postre poder volver y hacerlo en el club. Intercambio algunos mensajes con la gente que está trabajando hoy, tengo muchos amigos pero no hay nada más. Yo le atiendo el teléfono a todo el mundo, por ejemplo, si me llama Damonte también lo atendería. No quiere decir que le diga que sí o no. Hoy el puesto está cubierto a mi entender y a mi edad, quiero tener rodaje. En el último tiempo pasaron muchos “5” por el club. Poblete, “Torito” Rodríguez y yo no soy quién para decir quién tiene que estar en ese puesto.
Por último, destacó el trabajo del Pipi Romangoli y la secretaria técnica durante el interinato en el primer equipo: “Hicieron las cosas muy bien y en poco tiempo. A Pipi como técnico le fue bien. Sé la capacidad que tiene y uno es consciente que le iba a ir muy bien”.
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