Un respiro para cerrar el año

San Lorenzo empezó perdiendo ante Newell’s, la gente empujó haciendo una fiesta en las tribunas y el equipo lo dio vuelta. Victoria 3-2 para terminar un 2021 que debe quedar en el olvido.

Lejos quedó aquel inicio de año con Mariano Soso al mando del equipo. En el camino, Diego Dabove, Paolo Montero y los interinatos de la extinta Secretaría Técnica y Diego Monarriz intentaron cambiar un rumbo que cada día parecía ser más oscuro, pero nada funcionó.

Con el objetivo de terminar esta pesadilla con al menos una mueca de sonrisa, el Ciclón pisaba por última vez el Pedro Bidegain y el rival a vencer sería un Newell’s que también llegaba golpeado y sin esperanzas de luchar por un ingreso a las copas.

Para hacerle honor a estos doce meses de debacle profunda, los dirigidos por Diego Monarriz saltaron a la acancha con lentitud y la visita supo aprovechar rápidamente la distracción por izquierda para ponerse arriba a los 5 minutos con un desborde por izquierda que Francisco González empujó a la red.

La respuesta azulgrana a este golpe, que podría haber sido de nocaut en otros momentos, no vino desde la cancha, sino que desde las tribunas. Un incesante aliento bajó desde los cuatro costados para empujar a los jugadores, ganando la posesión y discutiendo cada pelota dividida, lo cual terminó forzando la expulsión de Mariano Bittolo en la Lepra por exceso verbal hacia el juez de línea.

Con un jugador más, la presión local fue en aumento y, tras un codazo en el área, el árbitro Fernando Espinoza pitó penal para que Néstor Ortigoza lo termine cambiando por gol, haciendo explotar el Nuevo Gasómetro con un coreo hacia su nombre.

Cuando los minutos de la primera mitad estaban llegando a su fin, un tiro de esquina  terminó recayendo en Julián Fernández para que marque el segundo tanto del conjunto rosarino, siendo un golpe completamente inesperado por el marco que se estaba dando en el partido.

De todas formas, habría lugar para un último suspiro. En tiempo de descuento, Franco Di Santo logró destaparse después de cinco encuentros con sequía y se reencontró con el grito sagrado para ir al vestuario 2-2.

La energía no se modificó en el complemento y en tan solo dos minutos otra vez Di Santo hizo romper las gargantas en las tribunas otra vez poniendo el 3-2, haciendo valer su altura para ganar de cabeza en el área.

Para no dejar decaer la confianza ganada, la dupla técnica quitó a Ezequiel Cerutti y a Uvita Fernández para darles lugar a Nahuel Barrios y al debutante Eduardo García, buscando frescura en la última línea y sentenciar la historia.

Sobre el final, el mediocampo fue el centro de la batalla. Un expulsado más para los santafecinos (Diego Calcaterra) y Alexis Sabella para el azulgrana, quien solo estuvo 17 minutos en cancha desde su ingreso del banco.

De esta manera, Boedo termina un 2021 que debe quedar rápidamente en el olvido. A partir de ahora, la búsqueda de un nuevo entrenador y la reorganización institucional serán fundamentales para no repetir los errores que llevaron a este presente que se debe revertir antes de sufrir consecuencias peores.

Mundo Azulgrana

@mundoazulgrana

Sitio web y programa de radio dedicado al Club Atlético San Lorenzo de Almagro

Comentarios
-