A 9 años de la gloria eterna

Un 13 de agosto del 2014, el San Lorenzo del Patón Bauza lograba el título que más anhelaba y le había costado en toda su historia. El ciclón se consagraba campeón de America ante un Nuevo Gasómetro repleto de hinchas. 

Tras 106 años de historia, el equipo que tenía a Leandro Atilio Romagnoli luciendo la camiseta número 10, jugó con alma y corazón la copa que los hinchas tanto necesitaban ganar. Y así fue, aquel día el árbitro Ricci pitó el final y la espera que perduró durante décadas se terminó: San Lorenzo conquistó América. 

Fue un largo camino que arrancó en la zona 2 junto a Botafogo, Unión Española e Independiente Del Valle. Tras una difícil fase de grupos con dos victorias, dos empates y dos derrotas logró una clasificación agónica.

Sobrepasó a dos brasileños en octavos y cuartos como Gremio y Cruzeiro. Al tricolor lo paso por penales tras empatar 1 a 1 en el resultado global y en cuartos pudo evitar la tanda de cinco, ganando 1 a 0 en el Nuevo Gasómetro y trayendo un empate desde Brasil. 

Ya con la mente en la semifinal, el equipo mostró su mejor actuación. Ante Bolívar ganó en su cancha 5 a 0 y aunque en las tierras vecinas perdió 0 a 1, el resultado global le daba el pase a la tan esperada final. 

Llego el momento donde solo quedaban 180 minutos que había que jugar y disputar cada pelota con el corazón de cada hincha Azulgrana. San Lorenzo se trajo un empate de Paraguay ante Nacional y en su cancha repleta de toda su gente, el equipo que eligió Edgardo Bauza contó con Sebastián Torrico; Julio Buffarini, Mauro Cetto, Santiago Gentiletti, Emmanuel Mas; Héctor Villalba, Juan Ignacio Mercier, Néstor Ortigoza, Leandro Romagnoli; Mauro Matos y Martín Cauteruccio. 

A los 36 minutos de la primera etapa, tras un arranque repleto de sufrimiento y nervios, Néstor Ortigoza cambió penal por gol y selló una jornada histórica en el Nuevo Gasómetro. El equipo que venía de luchar dos años atrás por la permanencia en la máxima categoría del fútbol argentino, ese 13 de agosto de 2014 llegó a la cima de la competencia: San Lorenzo Campeón de America.

Por Agustina Milidoni.