Después de 31 años, la misma película

Es difícil comenzar este programa de la historia y de la memoria, anoche (por el sábado) se escribió otro capítulo en este ciclo que lleva 31 años en manos de este personaje nefasto para San Lorenzo llamado Julio Grondona.

El arbitraje de Lunati nos perjudicó notoriamente, el penal a Romagnoli que ve y no cobra es realmente la demostración de esta mafia que busca que San Lorenzo descienda.

No faltarán quienes digan que miremos para adentro y por supuesto que lo hacemos desde siempre, cuestionando primero a la gestión que nos llevó a esto, la de Rafael Savino, uno de los peores presidentes de nuestra historia, un servil al anti-sanlorencismo, un ignorante que nos dejó en la ruina. De esta gestión siempre lo dijimos, un paracaidista que no sabe lo que fue San Lorenzo, el famoso millonario que espera el votante del Club, un Annán al cuadrado.

Independientemente de lo de adentro, observemos como la mafia de la calle Viamonte nos quitó 5 puntos en una semana, el domingo Abal, ayer Lunati la mano de obra para hundir a San Lorenzo.

En estas horas donde el ejercicio de la memoria es aún mayor, cuando se cumplen 36 años del golpe de estado cívico-militar ejercito la memoria de aquellos socios y miembros de la tribuna desaparecidos que tuvo el Gasómetro, pero esta coyuntura futbolística empujada desde la misma AFA, con arbitrajes que “ca$ualmente” se equivocan en contra de San Lorenzo nos lleva a recordar qué pasó en el 81, donde el equipo de Pajarito Suarez Masson misteriosamente se quedó en primera cuando estaba condenado. “Argentinos no se va” fue la frase que el asesino-represor tiró por elevación a quien 31 años después sigue con su anti-sanlorencismo a cuestas.

Lo visto con Colón y Rafaela me llevó a recordar parte de aquellas bombeadas de 1981, con otros verdugos, ayer Nitti, Ithurralde. Busca mandándonos a Primera “B”, en el medio de la historia, bajándonos en finales de campeonatos, con los Loustau, Lamolina, Jiménez, el triangular que “Rafa” regaló y ahora con nuevos actores ante una dirigencia que no defiende a San Lorenzo nos quiere pegar el tiro de gracia.

Ayer los penales a Romagnoli y Romeo, el domingo Abal ante Colón, hace 31 años, las dos  manos de Fren de Independiente salvando el gol de San Lorenzo y Claudio Busca que de frente a la jugada no da el penal, más los dos penales que no le da a San Lorenzo. Una semana después es Ithurralde que le anula un gol legítimo a Scotta en el partido ante  River.

Hoy con los mismos métodos nos meten la mano en el bolsillo, falta inventar algún doping al estilo Carabelli como para darle un punto en los escritorios a alguno de los rivales que peleen el descenso con San Lorenzo. Aunque  la tarea de los de negro viene saliendo viento en popa, nos quitaron 5 puntos en una semana.

Los jueces mencionados Ithurralde y Busca que junto al inolvidable perjudicador de San Lorenzo, Teodoro Nitti, se cansaron de equivocarse en contra de San Lorenzo.

Justamente esta terna de árbitros dirigieron al Ciclón 22 cotejos entre 1980 (Metro y Nacional) y el Metro 81, sin que San Lorenzo gane un partido,  siendo perjudicado por errores arbitrales de estos tres lamentables jueces casi en la mitad de los encuentros. Sumando a Abel Gnecco en el descenso de 1981, fuimos dirigidos la cuarta parte de aquel Metropolitano por los árbitros nombrados.

El empuje al descenso de parte de la casa madre del fútbol tuvo como corolario que en el final del torneo (a dos fechas de terminar el campeonato) le dieron un punto más a Argentinos Juniors en los escritorios por un supuesto doping de Abelardo Carabelli (ex Argentinos Juniors) en el partido que empataron Talleres y Argentinos en Córdoba, punto que fue decisivo, todas cosas extrañas que perjudicaron a San Lorenzo. Así San Lorenzo finalizó al terminar el campeonato a una unidad de Argentinos y Talleres, a dos de Estudiantes y Sarmiento de Junín y a tres de Platense y Velez, y de no ser por estos bombeos y algunos cotejos más, hubiéramos finalizado en mitad de tabla.

El Periodismo vernáculo de hoy nos dice que si nos tocara perder la categoría no sería por los dos puntos que nos arrebataron con Colón, lo expresado más arriba demuestra lo contrario. Francisco Lamolina ex árbitro, quiere explicar lo inexplicable, al defender a Abal,  si el mismo ex árbitro que nos quitó un punto ante Boca una noche de 1989 al cobrarle sobre la hora mancha a Ángel Bernuncio  anulando el gol que significaba un 3 a 2 sobre los xeneizes, el mismo del gol de Latorre con el puño (lo vio el país menos Lamolina) en un partido en la Bombonera, el mismo que nos dejó con 9 ante Boca en 1996, mirá quien nos quiere explicar lo de Abal.

Al finalizar el cotejo del último domingo ante Colón y tras observar el efusivo abrazo de Abal con sus colaboradores, tras los insultos por la impotencia, me vino a la mente la historia contada más arriba, San Lorenzo debió liquidar el partido antes, de no ser por el amarretismo del técnico, pero el perjuicio por este lamentable arbitraje a la institución ha sido muy grande.

Muchos medios han desviado el eje de lo que sucedió en el Pedro Bidegain, buscando culpabilizar a la gente, es que en realidad estos cipayos de la comunicación, siempre han estado lejos de la gente, más allá que la necesiten para seguir cobrando sus jugosos sueldos, por casi nunca decir la verdad.

Nadie habló de la feroz represión a niños, ancianos, mujeres y adultos tras finalizar la obra de terror al estilo Narciso Ibáñez Menta que dirigió el señor Abal, que después de lo que generó, tendría que analizar su retiro del arbitraje. No está capacitado para esta actividad.

Hace 31 años  Claudio Busca, Teodoro Nitti, Arturo Ithurralde, fueron los instrumentos de Julio Grondona quien  nunca pudo ver a San Lorenzo desde su llegada a la A.F.A, ese hombre que se hizo famoso condenando a San Lorenzo afirmando como bandera “En mi gestión cualquiera puede ser campeón o descender”.

Treinta y un años después el mismo personaje, tiene  como instrumento a otros actores pero con el mismo objetivo que en 1981. Para reflexionar.

Adolfo Res (www.volveavenidalaplata.com.ar)