10 años de Pekín
En 2008, la Selección Argentina ganaba su segunda medalla dorada en los Juegos Olímpicos disputados en China con la presencia azulgrana de Pablo Zabaleta y Ezequiel Lavezzi.
Dicen los expertos que no es bueno quedarse anclado en el pasado, sino que hay que mirar al futuro en lugar de rememorar tiempos que no volverán. Dirán lo que dirán, pero es inevitable, más en los tiempos que corren, no recordar esa Selección Argentina que pasó a la historia de los Juegos Olímpicos hace diez años.
¿Qué fue lo que sucedió? A seis de los dieciocho jugadores que formaron parte de aquel combinado dirigido por Sergio Batista, los llamó Jorge Sampaoli para el Mundial de Rusia 2018. Diez años dan para mucho, pero ¿cómo es posible que aquella generación no haya sido capaz de cumplir las expectativas creadas?
Acosta, Agüero, Banega, Buonanotte, Di María, Fazio, Gago, Garay, Lavezzi, Mascherano, Messi, Montón, Pareja, Riquelme, Romero, Sosa, Ustari y Zabaleta. El ‘dream team’ de Pekín. Además fue parte del plantel aunque no jugó ningún partido, Nicolás Navarro, actual arquero titular del Ciclón, quien se sumó por la lesión de Oscar Ustari.
Argentina ganó la medalla de Oro en los Juegos Olímpicos de 2008 de manera brillante. Retuvieron el título de campeones que lograron por primera vez en Atenas 2004 y marcaron el récord olímpico de doce partidos sin perder: los seis de Grecia y los otros seis de China. La Selección se despidió de Pekín con pleno de victorias, 11 goles a favor y sólo 2 en contra.
Uno de los encuentros que ganaron en esos JJ.OO. fue ante Brasil. Si bien todos los jugadores han de tener 23 años o menos, se permite convocar hasta tres futbolistas mayores de esa edad. En las filas argentinas estaban Javier Mascherano, Nicolás Pareja y Román Riquelme; entre los brasileños se encontraba el mismísimo Ronaldinho, que acabó llorando tras el 3-0 de Argentina a Brasil en la semifinal.
Hace 10 años, Argentina también ganó a Brasil en otro torneo importante, en este caso de póker. Se empezaban a conseguir premios en el poker argentino. Fue el principio de una serie de buenos resultados que culminaron con hitos en 2017 como que un argentino, Damián Salas, llegase por primera vez a la mesa final de las World Series of Poker o que Richard Dubini fichase por Partypoker, una de las compañías más importantes del sector. En los naipes se fue de menos a más, una evolución lógica, ¿pero en el fútbol?
En los siguientes Juegos Olímpicos, los de Londres 2012, no se consiguió la clasificación. Un presagio, quizás, de lo que estaba por venir. En Brasil 2016, no se pasó de la fase de grupos. La mala racha se extendía a los más jóvenes de la Albiceleste tras los años de las decepciones con una Absoluta que salió de esos JJ.OO. de 2018.
Es doloroso pero hay que recordarlo, forma parte de la terapia:
- En la Copa del Mundo de 2010, como en la anterior, la Selección Argentina cayó en los cuartos de final.
- En 2011, tras dos ediciones en las que se consiguió quedar subcampeón, Argentina pierde en los cuartos de final de la Copa América. Sin embargo, se obtiene la plata en los Juegos Panamericanos.
- En 2014 se alcanzaría por fin la final del Mundial, 24 años después de la última (Italia ’90), para acabar perdiendo en la prórroga ante Alemania.
- A esta final le siguen las derrotas en otras dos, la de la Copa América de 2015 y de 2016.
- Por tercera vez en su historia, en 2015 Argentina no participa en los Juegos Panamericanos; una competición donde la Selección había dominado con 11 medallas, 7 de ellas de Oro.
Podría decirse que la medalla de Oro en Pekín 2008 es la última ocasión en la que la Selección Argentina logró resolver con éxito su participación en un campeonato internacional de máximo nivel.
Antes, algunos de los campeones olímpicos de 2008 ya habían conseguido títulos importantes con la Albiceleste:
Pablo Zabaleta, canterano azulgrana, junto a Lionel Messi y Eber Banega estuvieron con los seleccionados de Francisco Ferraro que ganaron la Copa del Mundo Sub-20 en 2005. Igual que en Pekín 2008, los argentinos se impusieron a Nigeria en la final.
Dos años más tarde, entre los hombres convocados por Hugo Daniel Tocalli, quien fuera coordinador general de las divisiones juveniles azulgranas en los últimos años, para el Mundial Sub-20, estaban Banega, Di María, Fazio y Agüero. Argentina repitió título. A partir de entonces, 2007, en ninguna de las cinco ediciones siguientes de esta competición se ha conseguido quedar entre los 4 primeros.
¿Será posible que la falta de títulos tras Pekín 2008 se deba a las ausencias? Fue muy comentado, tanto a nivel nacional como internacional, cómo Ezequiel Lavezzi fue el gran olvidado en la convocatoria de Sampaoli. Nunca entró en los planes del técnico, algunos piensan que porque se le acabó la nafta, otros que fue por su comportamiento digamos que “poco discreto”.
Muchos, después de notar falta de unidad en la Selección durante el Mundial 2018, se preguntan si un hombre con la personalidad de El Loco no hubiera sido necesario en el vestuario, incluso aunque no hubiera jugado ni un minuto.
En 2008, cuando Lavezzi ganó el Oro con Argentina, venía de haberse proclamado campeón con San Lorenzo en el Torneo Clausura 2007 y de haber pasado su primera temporada en el Napoli. Diez años después la historia es muy diferente.