Destrozando identidades
El análisis final, los principales motivos y los números del título conseguido por San Lorenzo en la Liga Nacional de Básquetbol 2015/16. El Ciclón volvió y revolucionó el básquet argentino.
Lo reconozco: hace varios años que creo que la frase “el ataque gana partidos, la defensa campeonatos” es retrógrada. Y esto no significa que el aspecto defensivo no sea clave en pos de un resultado óptimo. Por lo contrario, focalizo el concepto desde cómo ha cambiado el juego, una modernización con plena influencia de la NBA, haciendo gala de verticalidad ofensiva y la prioridad de buscar una selección de tiro en el menor tiempo posible. En definitiva, el básquet se ha transformado en un juego de posesiones y porcentajes. Y ser exitoso apostando a maximizar recursos ofensivos, teniendo jugadores en los cuales respaldarse, ya no es quimérico.
Justo San Lorenzo, un equipo que jamás demostró regularidad en la búsqueda de su identidad, se la robó a todos sus rivales en postemporada. Primero le bajó 15 puntos de promedio a Obras para barrerlo 3 a 0. Luego dio el golpe con un 3-1 letal a Gimnasia Indalo, a quien desnudó prohibiéndole sacar provecho de su genial juego de ventajas/pases/eficacia. En la final de Conferencia, notó que el mecanismo para sacarse de encima al rebelde Bahía era limitando su agresividad a campo abierto, y lo logró con creces. Allí, jugó su peor serie ofensiva, pero maniató al equipo de Ginóbili negándole dominar la escena con su ritmo. Y completó la gesta con una exposición de balance defensivo, sacrifico en el 1vs1, solidaridad en ayudas y segundas ayudas y lucidez a la hora de rotar para aniquilar a La Unión en la final. Sí, eso hizo San Lorenzo desde su estrategia defensiva: aniquiló identidades.
Penka (personalidad), Faggiano (piernas/desplazamientos), Elliott (top en balances) y Mata (animal) fueron geniales en la primera línea, vital para jugar el ritmo que Lamas necesitaba. Y la dupla Martina/Matthew Bryan completó el pack; el primero por su garra, el segundo por su mix atlético-técnico.
CASLA tardó toda la etapa regular en encontrar el botón que lo potenciaría al título. Pese a su gran inicio, no clasificó al Súper 4, tuvo una época estival repleta de conflictos y salvo en la serie frente a Obras jamás contó con la ventaja deportiva. Poco le importó. Desempolvó del baúl de los recuerdos una frase que por vieja no deja de funcionar. ¿Que Aguirre es un líder nato? Sí. ¿Que Herrmann juega a otro nivel? Sí. ¿Qué Matthew demostró que el juego de poste bajo no está extinguido? Sí. Pero el salto de calidad lo dio atrás. ¡Defense, defense! …
Los números del campeón
Jugó 71, ganó 43 y perdió 28.
San Lorenzo como local: jugó 36, ganó 26, perdió 10.
En Playoffs: jugó 8, ganó 8, no perdió.
En Ferro: jugó 20, ganó 15, perdió 5.
En Obras: jugó 16, ganó 11, perdió 5.
San Lorenzo como visitante: jugó 35, ganó 17, perdió 18.
En Playoffs: jugó 7, ganó 5, perdió 2.
Las mejores victorias
Segunda Fase: Instituto 58 San Lorenzo 103 (+45)
Primera Fase: San Lorenzo 92 Argentino de Junín 65 (+27)
Segunda Fase: San Lorenzo 93 Quilmes 67 (+26)
Segunda Fase: San Lorenzo 100 Peñarol 75 (+25)
Segunda Fase: San Lorenzo 96 Libertad 71 (+25)
Primera Fase: San Lorenzo 87 Bahía Basket 63 (+24)
Primera Fase: San Lorenzo 77 Ferro 57 (+20)
Primera Fase: Argentino de Junín 70 San Lorenzo 90 (+20)
Las peores derrotas
Segunda Fase: Ferro 82 San Lorenzo 55 (-27)
Segunda Fase: Gimnasia Indalo 107 San Lorenzo 80 (-27)
Por Carlos Altamirano
En twitter @altamirano45 Periodista. Relator de básquet en DIRECTV Sports y DEPORTV, es además uno de los conductores de La Liga Debate, que se emite todos los lunes a través de La Liga Contenidos.