El historial ante Banfield

San Lorenzo y Banfield jugarán mañana desde las 16.15 en el estadio Bidegain, por la fecha 8 de la Superliga, el partido 90 a nivel local entre ambos. El Ciclón se impone en la historia, pero no siempre fue así.

El primer partido en el que los dos equipos se vieron las caras fue hace ya 77 años, más específicamente el 23 de junio de 1940. Aquel día, con goles de Eduardo Heisecke y el español Isidro Lángara, San Lorenzo empató 2-2 con Banfield por la fecha 11 en el Viejo Gasómetro. Cuando cinco meses después debieron chocarse nuevamente por la fecha 28, el resultado no varió: fue 2-2 con doblete de Langara para los Santos.

Aunque la paridad entre el Cuervo y el Taladro permanecía, en el torneo de 1941, el Ciclón despachó por 4-1 a los del sur, sienda esta, la primera goleada que se registró entre ambos. Pero la fiesta duró poco en Boedo, porque la paternidad de San Lorenzo no logró perdurar, ya que a partir de aquel encuentro, la diferencia de partidos siempre fue para Banfield.

El malefício parecía que iba a quebrarse en abril de 1950, cuando los azulgranas, comandados por José Cuesta Silva, no tuvieron piedad y golearon 8-2 al Taladro. En aquel encuentro, Mario Papa lideró con un hat-trick a los Cuervos, tres goles claves para que finalizara el torneo siendo el máximo goleador con 24 tantos.

Sin embargo, Banfield volvió a la carga en la fecha 21 del mismo campeonato y, con un 3-0, continuó con la soberanía sobre los Santos. Pero San Lorenzo ya había mostrado lo que podía hacer, y hubo un lapso de tiempo entre 1963 y 1968 en el que se disputaron el poder, no pudiendo sacarse diferencias notables entre ambos.

Fue justamente en 1968 cuando el Ciclón logró imponerse definitivamente. Ese año, con un 2-1 de visitante, reafirmado por un 4-0 un año más tarde, pasó a dar vuelta la historia y sellarla hasta estos días. Ahora, San Lorenzo mantiene una marcada diferencia de 12 partidos a favor con Banfield y lleva 49 años seguidos con esta paternidad.

Los últimos cinco choques entre ambos fueron dos victorias para San Lorenzo, una derrota y empataron los dos restantes. De esos cinco, el más recordados por los sanlorencistas seguramente será el 4-1 en el Nuevo Gasómetro por motivo de Copa Sudamericana.

Aquel 4-1 se llevó a cabo la noche del 13 de septiembre de 2016, y fue una muestra de carácter por parte de los futbolistas azulgranas, ya que fue el partido de vuelta por Copa Sudamericana. Habiendo perdido en la ida por 2-0, San Lorenzo estaba obligado a ganar por esa diferencia o más para avanzar de ronda. Y lo estaba haciendo por 3-0 a los tempranos 11 minutos del primer tiempo. El Bidegain deliraba con la cátedra de fútbol que mostraban los dirigidos por Diego Aguirre.

Sin embargo, la historia se complicó cuando Banfield, de la mano de Alexis Soto, descontó a los 25 minutos y hacía soñar a los hinchas del Taladro con pasar a octavos de final. Pero no todo estaba dicho. A metros del área rival, Martín Cauteruccio le cedió la pelota a Néstor Ortigoza, quien con la delicadeza que lo caracteriza, pinchó el balón para que el uruguayo vaya a buscar el pase flotado y definiera con una chilena que dejó pasmado al arquero Hilario Navarro.

Pero esta apasionante historia no terminó ahí. Cuando el reloj señalaba los 88 minutos, Emmanuel Más, lateral por izquierdo de aquel San Lorenzo, cometió una falta dentro del área local. Todos los cuervos empezaron a rezarle a San Torrico para que, como en la copa Libertadores 2014, extendieras sus alas y desviara aquel penal.

A tan solo dos minutos para el pitazo final, Sebastián Torrico hizo lo suyo, le atajó el fuerte tiro que Santiago Silva había ejecutado, y de esa manera salvó una vez más a San Lorenzo. Así es como, con un un gol de Matías Caruzzo, que había abierto el marcador a los 3 minutos, dos de Blandi, que se ocupó de alargarlo, y uno de Cauteruccio, quién selló la victoria, San Lorenzo avanzó de ronda en aquella Copa Sudamericana y extendió su paternidad sobre Banfield.