El baile que terminaron antes

Si rememoramos al pasado del clásico entre San Lorenzo y Huracán, encontrar victorias del Ciclón es muy accesible, incluso si recortamos la búsqueda a partidos en el Tomás Adolfo Ducó. Goleadas, partidos ajustados, goleadores o figuras desconocidas, todo se puede observar en éste duelo barrial. Lo que ocurrió en el Apertura 2002 ya es más peculiar; mientras San Lorenzo rumbeaba para campeón de Sudamérica y el Globo se hundía en la parte baja del torneo doméstico, se enfrentaron por la fecha 16 de aquel campeonato.

Ruben Darío Insúa daba entrada los once de siempre sin guardarse nada, y a los nueve minutos del primer tiempo el Matador se puso en ventaja gracias a un tanto de Rodrigo Astudillo tras un corner y un doble cabezazo. El mismo cordobés sería el encargado de estirar diferencias, cuando a los 45 liquidó al arquero Quemero, Sergio Schulmeister, y decretó el 2 a 0 parcial. En el segundo tiempo se vendría lo mejor...

Recién nacía el complemento, y apareció un goleador inusual, el capitán Pablo Michelini marcó a los dos minutos para que el capo del barrio pase de ganar a golear. Adentro era un baile y afuera una fiesta toda azulgrana, que se terminó de cerrar con el hat trick del "Potro" Astudillo. A los siete minutos firmó su tercero de la tarde en Parque Patricios y los vecinos no se la aguantaron.

Como adentro era un baile que si los jugadores de San Lorenzo querían terminaba en humillación, los hinchas de Huracán decidieron cortarlo once minutos antes impidiendo que la goleada se estirara. El historial y la paternidad sumaron un hito más, "El día que lo cortaron antes".

Huracán 0: Sergio Schulmeister; Rodolfo Graieb, Marcelo Kobistyj, Gabriel Lobos, Ramón Pedro Ortiz; Alejandro Alonso, Daniel Garipe, Pablo Monsalvo, Diego Cochas; Emanuel Villa, Juán Ramón Fleita. 

San Lorenzo 4: Sebastián Saja; Celso Esquivel, Gonzalo Rodríguez, Claudio Morel Rodríguez, Aldo Paredes; José Chatruc, Pablo Michelini, Cristian Zurita, Leandro Romagnoli; Rodrigo Astudillo, Nicolás Frutos.