Igualdad amarga

San Lorenzo presentaba los debuts de Elías Pereyra y Gerónimo Poblete para amigarse con la victoria en la Superliga, hito que parecía encaminado cuando un pelotazo largo de Marcos Senesi -buena actuación del entrerriano- se convirtió en asistencia para Ruben Botta, quien cara a cara con Guillermo Sara puso el 1 a 0 a los 25 de la etapa inicial. Presionando en tres cuartos de cancha rival, pero penando por el sector derecho, los de Claudio Biaggio estiraron diferencias a los 35, con un pase exquisito de Pereyra para Nicolás Blandi -un paso en offside-, que le cambió de palo el centro al golero granate para el 2 a 0. Minutos antes de la conquista, a Nico le anularon un gol por un foul fantasma. 

Cuando parecía que sin hacer grandes méritos más que la eficacia, San Lorenzo se iba a ir con dos de ventaja al descanso, una pérdida de Franco Moyano -otro partido en pésimo nivel- terminó en un fuerte remate de Pereyra Díaz, el cual complicó a Nicolás Navarro; el arquero del Ciclón rechazó hacia el centro y Sebastián Ribas descontó a dos minutos del cierre. Lanús había tenido alguna con la pelota quieta. El resultado era más justo.

Apenas comenzado el complemento, otra vez un centro del equipo dirigido por Carboni se convirtió en peligro: Nicolás Thaller se elevó más que el resto, y con un cabezazo de pique al piso la ubicó pegado al poste izquierdo de Navarro. El grana pegó en los momentos justos y se lo empató al Matador, que además de la carencia de juego habitual, tampoco provocaba por la presión.

Los minutos fueron pasando y el partido se quebró, ambos tuvieron posibilidades de ganarlo pero la eficacia no se hizo presente. Ruben Botta y Gerónimo Poblete se mostraron como puntos altos, Víctor Salazar elevó su rendimiento en los segundos cuarenta y cinco, pero a San Lorenzo no le alcanzó para romper la paridad. Nicolás Reniero fue el único cambio que tuvo tiempo de demostrar, pero otra vez estuvo lejos de sus mejores tardes.

De esta manera se cerró una nueva tarde en el Pedro Bidegain; los más de 25.000 que soportaron el frío, el agua y otra producción austera de San Lorenzo, presenciaron el segundo empate en igual cantidad de presentaciones. Ahora se viene Nacional por Copa Sudamericana, y el Ciclón tendrá que pulir el juego aéreo si no quiere dar goles de visitantes como contra Temuco.