Nano querido, Boedo está contigo

El inicio del Torneo Clausura 91 había sido promisorio. San Lorenzo debutó venciendo a Estudiantes por 2 a 1 en cancha de Ferro, con goles de sus flamantes refuerzos: Matosas y Czornomás. Por entonces el técnico era Ricardo Rezza, aunque luego de empatar con Platense y derrotar a Argentinos por 2 a 1, el Ciclón cayó en un partido gris ante el globo por la mínima, lo que caldeó los ánimos. Rezza fue cesado esa misma tarde por el presidente Fernando Miele.

La mejor carta que encontró para encaminar la campaña San Lorenzo, fue el arribo del ex jugador del club Fernando Areán, recordado por integrar el equipo carasucia en 1964/65 junto a Veira, Doval, Casa y Telch. El “nano” pronto habría de aportar toda su sabiduría y conocimiento para la reacción deportiva del Ciclón, que se convirtió en serio rival del puntero Boca.

Areán debutó en la quinta fecha y San Lorenzo derrotó al siempre difícil Unión en su estadio por 2 a 0. San Lorenzo formó con: Ruiz Díaz; Zandoná, Céliz, Ballarino y Montenegro; Matosas, Carrizo, Aguilar; L.Rodríguez, Ahmed (Nartallo) y V. Ferreyra (Riquelme). Leo Rodríguez abrió la cuenta a los 21 y en el complemento a los 25 la “mona” Ferreyra cerró el resultado.

San Lorenzo finalizó segundo en aquel torneo, siendo perjudicado airadamente por el juez Loustau en el partido ante los boquenses, quienes sin embargo luego perdieron las finales por el título ante Newells. El Ciclón por su parte disputó después la liguilla pre Libertadores eliminando en serie a Independiente, River y al propio Boca, obteniendo un heroico pasaje a la Copa Libertadores 92.

A pesar de ser cesado precipitadamente en abril del 92, luego de un empate de copa ante Universidad Católica, Areán dejó un buen recuerdo en sus jugadores por su capacidad de docente de fútbol. Su último arribo al club fue en un retorno fugaz en 2010 como colaborador del técnico “interino” Sebastián Méndez, una experiencia fallida de 7 partidos que no lo llegó a tener en cancha.