Un sabio brasileño por Boedo
Hace 50 años San Lorenzo contrataba a un desconocido técnico brasileño que revolucionaría con sus métodos simples al Ciclón campeón del Metro 68 y al fútbol argentino: Elba de Padua Lima “Tim”. Un ídolo del Fluminense, que luego de su paso por el Ciclón dirigiría al otro grande de Río que nos visita hoy.
Para el Nacional de 1967 San Lorenzo en una jugada audaz de su presidente Angel Colacino, contrató a un entrenador brasileño llamado Elba de Padua Lima o “Tim” como era mayormente identificado. En su país era un hombre reconocido e ídolo del Fluminense, con quien había ganado 4 ligas cariocas como jugador (entre 1936 y 44) y una como entrenador (en 1964). Tim también había jugado buen tiempo con la Selección de Brasil, disputando incluso el Mundial de 1938 en Francia.
El brasileño ya conocía el “viejo” Gasómetro, por haber jugado aquella famosa final del Sudamericano del 37 donde la Selección Argentina venció a Brasil en un accidentado partido ganado en tiempo suplementario con 2 goles de Vicente De La Mata. También había enfrentado a San Lorenzo en un amistoso en 1941 en cancha de Chacarita, donde incluso señaló uno de los goles (su equipo perdió 4 a 2).
A pesar de las dudas iniciales sobre sus condiciones Tim pronto se destacó por su habilidad para manejar el plantel profesional. “La concentración es imprescindible” afirmaba, para mantener alejado de los vicios de la noche a sus jugadores. Con ese concepto armó al equipo campeón del Metropolitano de 1968, conocido como “Los matadores”, que resultó el primer vencedor invicto de un torneo argentino. Solo Alberto “toscano” Rendo (que ya estaba casado) tenía permiso en aquel conjunto para ir a descansar a su casa, dada la confianza total que tenía Tim en él.
Se cuenta que tenían gran influencia las charlas con sus dirigidos en los entretiempos de los partidos, donde mostraba con chapitas como debían cambiar y moverse por el campo. No es azar que San Lorenzo en aquella campaña convirtió 33 goles en los segundos tiempos, contra 16 en los primeros. Es el creador de la famosa frase de la manta corta, para explicar como debía moverse el equipo: el fútbol es una manta corta, si te tapás los pies te descubrís la cabeza, si te tapas la cabeza te descubrís los pies.
San Lorenzo venció a Estudiantes de La Plata en la final del metro 68, plasmando en poco tiempo sus influencias. Sin embargo la relación tirante que tenían los jugadores con la comisión por el tema primas fue mermando los rendimientos del equipo, alejado de los primeros puestos en el Torneo Nacional.
Tim se despidió del club pero dejó una gran enseñanza entre sus dirigidos. Partió luego al Flamengo en 1969, llevándose consigo a un crack del club, que venía de sufrir una injusta suspensión: Narciso Doval.