Los campeones de 1933
Un 19 de noviembre de 1933 San Lorenzo lograba su primer título de campeón en el profesionalismo, luego de vencer a Chacarita Jrs en la fecha final de un reñido campeonato donde los “gauchos” superaron a Boca por solo un punto, cuando nadie lo presagiaba.
Durante la temporada de 1933, San Lorenzo se mantuvo como uno de los animadores del certamen, pelando el certamen palmo a palmo junto a Gimnasia y Boca. Su ataque era lo más destacado del conjunto, siendo integrado por Magán, Cantelli (o Villalva), Petronilho, Diego García y Arrieta. Actuando como local en el Gasómetro los azulgranas tuvieron una regular actuación, ganando en trece cotejos, empatando tres (todos en la primera rueda) y perdiendo solo uno (una sorpresiva derrota ante el clásico con Huracán).
Uno de los cotejos más relevantes fue el de la fecha 28 ante “el expreso”, el poderoso equipo de Gimnasia de La Plata, que había sido el ganador de la primera rueda. San Lorenzo se imponía con toda justicia por 2 a 1, cuando en una acción el arquero Herrera tratando de evitar a un jugador de San Lorenzo introdujo la pelota en su valla. El tanto fue protestado por los jugadores visitantes, quienes también reclamaban un penal en una jugada anterior. Al sentirse perjudicados se sentaron en el campo de juego, sin oponer oposición a los jugadores azulgranas que de tal forma convirtieron hasta llegar a los siete goles. El partido luego fue suspendido.
En la fecha 32, San Lorenzo venció a Boca Jrs en Avenida La Plata cuando era escolta a un punto. Ante un público calculado en 70 mil personas se impuso por 2 a 0 y accedió a la cima. Sin embargo en la fecha siguiente perdió sobre la hora con Independiente y como Boca ganó su partido lo volvió a superar.
La fecha final jugada el 19 de noviembre traería nuevas sorpresas, favorables para los sanlorencistas. Boca (que se medía ante su eterno rival River Plate) sufrió una dolorosa derrota por 3 a 1. San Lorenzo visitaba a Chacarita en su estadio de Villa Crespo y necesitaba ganar o ganar. Esa tarde en Villa Crespo “los gauchos” formaron Lema; Pacheco y Fossa, Chividini, Scavone y Achinelli; Magán, Cantelli, Petronilho, Diego García y Arrieta. A los 20 minutos ante un centro, Diego García recogió una pelota y desde el suelo apenas con la punta de su botín, logró que la pelota ingrese unos centímetros, señalando lo que fue luego el único gol del partido. El tanto valió un título, el primero del profesionalismo. Diego García, un notable goleador, convirtió 160 goles con la casaca azulgrana, siendo el artillero del campeón con 22 tantos.
El “entrenador” azulgrana era el histórico kinesiólogo Atilio Giuliano, que había quedado al frente del equipo al alejarse en las primeras fechas el húngaro Marinetti.