Boedo se mudó a Barcelona
El clásico contra Huracán no sólo se vivió en Argentina; un grupo de cuervos se juntó en Barcelona a vibrar con la camiseta azulgrana, que sin jugar bien silenció al Ducó.
No hay distancia que separe el amor que le tiene el hincha azulgrana a San Lorenzo; Marruecos, Milán, Roma, el básquet en Madrid y ahora el clásico en Barcelona dan muestra de ello. Es verdad, el Nuevo Gasómetro no les queda a la vuelta de la esquina, pero el sentimiento parece que aumentara por cada kilómetro que separa a esa gente de Avenida La Plata 1700.
El presidente de los Cuervos de Catalunya, Paolo Renard Bazzaco, habló con MundoAzulgrana y contó: "Acá nos juntamos siempre a ver a San Lorenzo, no importa a la hora que sea. Venimos con esto hace más de diez años", y yendo puntualmente al clásico de ayer agregó: "Invitamos a todos los Cuervos a comer choripán, cada uno trajo su bandera y más allá del resultado nos cantamos la vida", detalló Paolo desde la ciudad condal.
Fueron nuevamente un centenar de hinchas del Ciclón que cumplieron desde España con el lema: "Sé que no hay distancia que nos pueda separar", ¡Que se repita!
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